Cómo Ópalo e Innobióticos cambian la fertilización en cereal
En Fertec Agro llevamos años recorriendo campos, escuchando a los agricultores y buscando respuestas a una pregunta clave: ¿cómo podemos producir más, con menos, sin agotar el suelo?
Porque al final, da igual la marca o el envase: lo que queremos todos es que la tierra responda, que los cultivos estén fuertes y que la cosecha llegue con calidad. Esa búsqueda nos llevó a probar tecnologías que hoy forman parte del día a día: Ópalo e Innobióticos.
De los fertilizantes de siempre… a una nueva generación de nutrición
Durante años hemos trabajado con fertilizantes convencionales. Pero cada campaña dejaba la misma sensación: pérdida de eficiencia.
- El nitrógeno se volatilizaba antes de ser aprovechado.
- El fósforo se bloqueaba en el suelo.
- El potasio se fijaba y no estaba disponible cuando hacía falta.
Conclusión: no se trata de echar más, sino de aprovechar mejor.
Ahí conocimos la tecnología Ópalo: una evolución real en la forma de fertilizar.
¿Por qué usar Ópalo en el campo?
Ópalo no es un abono más: sincroniza la liberación de nutrientes con el ritmo del cultivo.
Su diferencia está en el silicio biodisponible, un elemento del que poco se habla y que lo cambia todo.
- Mejor aguante al estrés hídrico.
- Hojas más verdes y erguidas.
- Rendimiento estable o mayor incluso reduciendo unidades de N.
¿El porqué? El silicio refuerza la estructura de la planta, mejora la fotosíntesis y regula la absorción de N, P y Ca. En suelos calizos o con salinidad, el cambio es aún más evidente.
Ensayos que confirman lo que ya veíamos en campo
Ensayos del IRTA en Lleida y Tamarite de Litera.
| Cultivo / Manejo | Tratamiento | Resultado |
|---|---|---|
| Cebada de regadío | −30 % N | Rendimiento ≈ igual al testigo |
| Trigo de secano | −20 % unidades fertilizantes | +4 % vs. estándar |
| Regadío | Ópalo vs. 8-15-15 convencional | Hasta 6.900 kg/ha, superando claramente al 8-15-15 |
Más que cifras, son la prueba de que la eficiencia real existe: producir lo mismo —o más— sin sobrecargar el suelo ni el bolsillo.
El suelo también necesita respirar
“No hay plantas sanas en suelos cansados”. Por eso, junto a Ópalo trabajamos con Innobióticos: tecnología microbiológica que devuelve la vida al suelo.
En suelos castigados por laboreo, fitosanitarios o sequías, los consorcios microbianos (bacterias, levaduras y hongos como Bacillus, Pseudomonas o Saccharomyces):
- Reactivan el metabolismo natural del suelo.
- Rompen enlaces de la materia orgánica y liberan nutrientes bloqueados.
- Generan exudados que estimulan las raíces.
En pocas semanas se nota: mejor olor a suelo vivo, más estructura y plantas agradecidas.
Linx y Aquila: aliados en la regeneración del suelo
Linx, el reanimador del suelo
En terrenos castigados o con restos de paja y purín, Linx aceleró la mineralización de la materia orgánica, aumentó el nitrógeno total del suelo en +40 % y redujo el nitrógeno nítrico ↓ (el que se lava fácilmente).
En cereal de secano, el ensayo mostró +15 % de producción, traduciéndose en ≈ 150 €/ha de beneficio neto con inversión mínima.
Más allá del número: el suelo recuperó actividad y olor a vida.
Aquila, el potenciador de la fertilización
Aquila actúa como complemento bioactivo a la fertilización tradicional o a Ópalo. Su combinación (Bacillus megaterium, B. tequilensis, B. pseudomycoides) trabaja sobre los nutrientes:
- Solubiliza fósforo y potasio.
- Fija nitrógeno.
- Aumenta la disponibilidad de hierro.
Aplicación recomendada: junto al herbicida en pre o postemergencia a 2 L/ha. El resultado: plantas más equilibradas, raíces más activas y cultivos más uniformes.
Un suelo vivo es el mejor fertilizante
Además, estamos alineados con la dirección que marca Europa: reducir el uso de fertilizantes sin perder productividad. Con estas herramientas no es un reto imposible: es una oportunidad real.
Ópalo e Innobióticos demuestran que la innovación bien aplicada no sustituye al agricultor: lo empodera. En Fertec seguiremos apostando por un campo más productivo, más sostenible y con un suelo cada vez más vivo.
